miércoles, 30 de diciembre de 2020

Versos con lengua

asumo como propia
la tarea de lamer tus ojos
recurrir al acto reverencial
de disipar la alergia que te atañe
arrastrando con mi lengua procaz
los restos de viejos naufragios

porque amanezco cada día
repleta de flores y risotadas
mientras una voz desde el umbral
pronuncia mi nombre con esmero

porque nada en ti es desdeñable
pequeño ser atormentado
y tengo el osado sentimiento
de estar finalmente en casa

(Ruth Prado)

jueves, 13 de agosto de 2020

Tarde de gatos

Tengo un pozo antiguo
con una tabla gris en los labios
negando su gesto obsceno
sin éxito

Me adentro en él cada vez
con la curiosidad que describieron
los bisnietos de aquel gato,
y no temo caer, ni lastimarme
Me ensucio

Lo que temo es
que mis diablos queridos
cuyos mordiscos reconozco
ya no me estén esperando
en el fondo

martes, 3 de marzo de 2020

Microverdades

No hagáis una montaña de ello
cuando me vaya
Que a las montañas que nacen
nadie las llora

martes, 28 de febrero de 2017

Mienten las vigas

Seis vigas seis cuerdas
tres negras tres rojas
nacen allí mueren acá (así o asá)

Mienten porque habitan
más allá del muro
Mienten porque penden
como patíbulos, gárgolas brutas
erectas y osadas.

(Sigue la arista
con forma de dedo,
y no te desvíes, es fácil;
no hay instrucciones para una recta,
dudar ya es morir.)

Siempre juntas, separadas siempre
empalando por igual
piedra, papel, tijera,
hueso, plumón, espejo,
caballete y despensa,
heridas fatales de lo posible.

Mienten porque curvan
rectas cuando van
y a morir justo detrás
vuelven como si nada
de tres en tres
Y nadie lo sabe
Y nadie lo ve

miércoles, 22 de febrero de 2017

Patio andaluz

Cuando vuelvo a casa, la de ellos, la de todos. El portal derecho, pero el izquierdo, pero el derecho. No es, pero hago que sea. Faltan peldaños, nada nuevo. (Sé que) puedo saltar, inquieto, hábil. Aunque no es el vértigo mortal sino el otro, el pospuesto. Ya arriba, el pajar ruinoso. Vestigios de suelo, vigas expuestas. Cautela, puedo saltar, ansioso, ágil. De puntillas, de perfil. No respiro. Pero llego, abro, entro. Dentro está ella, la enana. Tal vez la quiero.

Coleópteros y columpios

Tan pronto es plástico, níquel, pulgadas, diagonales, teflón, bits.

Como piedra, hiedra, silencio, trino, aleteo, acequia, heno, fango.

Tan pronto es corbata, piel, oro, cano, betún, anillo, pluma, agenda.

Como nube, verde, agua, hormiga, leche, pelo, sol, sombra, gallo.

Va o vuelve, nunca sabe. No piensa, no agradece. Sólo muere aquí y allá.

lunes, 30 de enero de 2017

Extrusiones

Aún extiendo la mano a oscuras para tocar la madera del escritorio. Ya nunca la encuentro. A veces son los ojos al revés, colgando pósters, altavoces, relojes y miniaturas en la pared que ya no está. O la rendija de la puerta por donde se cuelan los tintineos de la tranquilidad solar. Nadie la abre ya para mí. Es entonces cuando recuerdo el recuerdo. Más débil cada vez, más irreal, más nunca-vivido. Y me digo que volverá apenas termine mi última hora.